Así lo adelanto la secretaria de Gobierno berissense, Aldana Iovanovich.
De cara al inicio de la temporada de verano, funcionarios del vecino municipio de Berisso anticiparon que se permitirá el ingreso de ensenadenses y platenses a las playas de la ciudad. De esta manera, en la ciudad de Berisso la actividad turística que comenzará a mediados de noviembre, estará habilitada solamente para sus habitantes y los visitantes de Ensenada y La Plata, según lo confirmó la secretaria de Gobierno berissense, Aldana Iovanovich.
Por lo que adelantaron, cada playa tendrá un puesto sanitario que trabajará en coordinación con los guardavidas y en los ingresos a los balnearios habrá un triage para controlar la temperatura de los visitantes y realizar algunas consultas, a fin de evitar el ingreso de personas que presenten algún tipo de sintomatología compatible con covid-19.
«Dentro de los balnearios estaremos apelando a la responsabilidad y controlando el respeto del distanciamiento social y la utilización de barbijo», agregaron desde la comuna. En ese marco, se está trabajando en la planificación de las acciones de primeros auxilios que deben llevarse a cabo ante un accidente o evento extraordinario, teniendo en cuenta el protocolo de normas y criterios que apuntan a minimizar los riesgos de contagio de coronavirus.
«Estamos organizando la temporada estival de acuerdo con los requisitos y protocolos que exige el gobierno de la Provincia de Buenos Aires. En este sentido necesitamos que haya una reducción de la capacitada ocupacional en cada una de las playas, por eso trabajamos diferentes alternativas para garantizarle a nuestros vecinos un verano seguro y cuidado», afirmó la secretaria comunal.
Cabe recordar que días pasados, el intendente de Ensenada Mario Secco había adelantado que para la próxima temporada de verano se analiza restringir el ingreso masivo de colectivos provenientes del Conurbano a la localidad balnearia de Punta Lara y que se trabaja conjuntamente con la Provincia en la elaboración de protocolos para la habilitación de la pesca recreativa en el murallón y de la pesca náutica con un límite de dos personas por embarcación.
