Miles de chilenos festejaron masivamente en la Plaza Italia, el triunfo que permitirá iniciar el largo proceso para enterrar este legado político de Pinochet.
La opción «Apruebo» al cambio de la Constitución se impuso este domingo de manera contundente en Chile y lograba un 77,85% de los votos, escrutadas más del 45% de las mesas de todo el país, por lo que ya era irreversible el inicio del proceso para cambiar la actual carta magna, impuesta en 1980 durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-90).
El «Apruebo» obtenía 2.496.143 votos, mientras la opción «Rechazo» lograba 710.378, en una elección que tuvo mayor nivel de participación que la media en el país desde que el voto es voluntario.

Se dieron festejos en las calles de todo el país, con vecinos celebrando desde los balcones de sus departamentos, en las puertas de sus casas y en autos con banderas y bocinazos.
El presidente Sebastián Piñera, acompañado de todo su gabinete, reconoció en rueda de prensa en el Palacio de La Moneda el triunfo del «Apruebo» y de la Convención Constitucional (que se conformará en un 100% por ciudadanos electos para este propósito con composición paritaria entre hombres y mujeres) para redactar la nueva Constitución.
«Hoy ha triunfado la ciudadanía y la democracia. Hoy ha prevalecido la unidad sobre la división y la paz sobre la violencia. Y esto es un triunfo de todos los chilenos que amamos la democracia, la unidad y la paz. Y sin duda, este triunfo de la democracia nos debe llenar de alegría y esperanza», expresó Piñera.
«Hasta ahora la Constitución nos ha dividido. A partir de hoy, todos debemos colaborar para que la Nueva Constitución sea el gran marco de unidad, de estabilidad y de futuro, y se constituya en la Casa de Todos y en la Ley Fundamental de la República, respetada y legitimada por todos los chilenos», sostuvo el presidente acompañado de todo el gabinete de ministros.

En esta consulta, calificada como histórica por ciudadanos y políticos, se imponía la opción de una Convención Constitucional como mecanismo para elaborar la nueva Constitución con un 78,97% de votos, mientras la opción de la Convención Mixta Constitucional (conformada en un 50% por constituyentes y 50% por miembros del Congreso) reunía el 21,03% de los votos.
La nueva Constitución deberá pasar por un nuevo plebiscito ratificatorio, en el que los chilenos deberán aprobar o rechazar este nuevo texto, que se espera se realice en 2022 y con esto el país podrá dejar atrás la Constitución de 1980.